Creo que todos nos equivocamos al buscar la felicidad...
Al tratar de hallar el sentido de la vida. Su propósito, aquello que nos haga ser capaces de
levantarnos de la cama mas allá de la inercia habitual y de la obligación.
Al final todo se basa en que amemos lo que hacemos, en que nuestro trabajo nos guste de verdad, y que meter horas extras sea menos doloroso, (Por supuesto, esto no será fácil en un curro habitual, pero debemos y podemos tratar de encontrar lo positivo al sitio donde tantas horas metemos) que no resulte ser una putada, como por desgracia acostumbra a ser. :S
Cuando miras la cara de un bebé ves pureza, sinceridad y transparencia. Lo único que busca es cariño y atención de verdad, claro está una vez que ya se ha alimentado y dormido lo necesario...
(Sin olvidar por supuesto su cambio de pañales xD )
No se diferencian demasiado nuestros deseos con los de los más pequeños.
Tan solo hemos ido creciendo física y mentalmente, pero a la vez nos hemos contaminado sin poder evitarlo esa "absorción" de problemas, manías y sinsentidos que la sociedad, tradiciones y demás nos sugiere y acabamos aceptando como inmutables e inevitables.
Cosas ilógicas como ir en coche al gimnasio para montarse en una bicicleta, (Si esta es la única actividad, es solo un ejemplo jeje)
Como bien dicen en la película "El Club de la Lucha" tenemos empleos que odiamos para comprar mierda que no necesitamos. Como podéis ver en el siguiente fragmento de YouTube: